Este 17 de marzo se celebra el Día de San Patricio en conmemoración de la fecha de la muerte del religioso católico patrono de toda Irlanda. Es también el día de la fundación de la católica República de Irlanda, donde se brinda por el santo a pesar de que la festividad religiosa prohíbe el consumo de alcohol.
San Patricio nació en el año 387 en Beenhaven Taberniae, Escocia. Se llamaba Maewyn Succat y su padre era un oficial romano cristiano.
Cuando era adolescente, fue secuestrado por unos piratas, que lo llevaron a Irlanda y lo obligaron a trabajar como esclavo en el pastoreo de animales. Consiguió escapar y se mudó a Francia.
Sin embargo, sintió la llamada divina y decidió regresar precisamente a Irlanda, el lugar donde lo habían tenido sometido, para liberar a sus captores. Allí peregrinó predicando el catolicismo, construyendo iglesias y ganando cada vez más popularidad.
Murió en el año 461 y fue enterrado en Saúl (Stragford Lough), el lugar en el que había construido su primera iglesia.
La cerveza es la bebida elegida para celebrar a San Patricio y es porque ambos están sumamente unidos. Dice la leyenda que fue este santo católico quien les enseñó a los irlandeses cómo elaborarla, cuando era un obispo en el Siglo IV.
Según las normas religiosas, no se debería beber alcohol durante el tiempo de cuaresma, o sea, antes de Semana Santa, pero se permite hacerlo en caso de una celebración litúrgica, como es el caso del patrono de Irlanda.