Los rumores son muchos, pero aseguran las fuentes de Casa Rosada, que el Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, ya no seguiría en el gabinete nacional.
Como una forma de solución “salomónica”, Eduardo Wado de Pedro, ministro del Interior, dejaría la cartera, Martín Guzmán, Vilma Ibarra, Juan Zabaleta, Gabriel Katopodis, Carla Vizzotti y Matías Lammens seguirían en funciones.
Como parte del arreglo con el cristinismo, Alberto Fernández se preservará las designaciones del jefe de Gabinete, el ministro del Interior, la Cancillería y el Palacio de Hacienda, y está dispuesto negociar la fusión de ministerios y secretarías para lograr que “los funcionarios funcionen”.
Juan Manzur, gobernador de Tucumán, aparecía como reemplazante de Cafiero en la Jefatura de Gabinete. Y su colega de San Juan, Sergio Uñac, sucediendo a De Pedro en la cartera del Interior. Ellos están dispuestos a correr el riesgo político de abandonar sus distritos y respaldar al Presidente.
Carlos Zanini, Procurador del Tesoro, seguirá en el cargo. Es la principal línea de defensa de la vice presidenta ante la Justicia y en toda esta crisis su nombre jamás fue cuestionado.
En tanto el país sigue paralizado por la inactividad de los principales ministerios públicos del país. El presidente saldría muy debilitado tras la crisis. Los principales analistas aseguran que Cristina Kirchner ganó la pulseada y puso en jaque la gestión de Alberto Fernández.
