Expertos aseguran que por el esquema de actualización se llevará la actualización de los alquileres a casi el 100%. Los precios siguen golpeando bolsillos y causando desesperación en los inquilinos, que además deben hacer malabares para conseguir una vivienda, cada vez más escasa en el país.
Los contratos que se firmen a partir del 1 de mayo, o deban actualizar su precio interanual, deberán hacerse con aumentos del 95,43 por ciento. Una situación compleja en donde los inquilinos deberán destinar más dinero de sus bolsillos para hacer frente al pago de la locación de la vivienda en la que residen o en la que se mudarán pronto.
Hay mucha preocupación en el sector inmobiliario y, además, hace más de dos semanas el Gobierno hizo trascender que suspendería la Ley de Alquileres vigente desde 2020 y que buscaría que el Congreso vuelva a tratar su posible reforma o derogación, pero todavía no hay información oficial al respecto. Según lo informado por cámaras sectoriales, los contratos se siguen firmando con plazos de 3 años de duración y ajustes anuales.
Siempre hay dudas, sobre todo de propietarios e inquilinos, en cómo calcular y aplicar los aumentos en los acuerdos que se firman. Existen varias Web que brindan detalles de cómo estipularlos, una de ellas es la del Instituto de Vivienda de la Ciudad de Buenos Aires (IVC). La ley sancionada en julio de 2020 tiene un esquema en la que se puede determinar el precio de los contratos.
En primer lugar, se debe colocar la fecha en la que se firmó el contrato, para saber cuál era el índice en ese momento; luego se debe seleccionar la fecha de actualización del contrato, y después el usuario debe indicar el monto inicial del contrato sin puntos para separar las decenas de mil.
Desde el segmento inmobiliario siguen sosteniendo que lo ideal sería volver a contratos a dos años y ajustes semestrales. Agrupaciones de inquilinos rechazan la opción y defienden los acuerdos a tres años. De acuerdo con el ICL en los últimos meses los aumentos interanuales fueron del 85,87 (los que renovaron en febrero 2023), 89,56% (marzo) y 92,59% (abril).
Sebastián Beigel, de Beigel Bienes Raíces, dijo que “el golpe inicial para quien debe actualizar su contrato es fuerte, porque de repente venía pagando una cifra y pasa a abonar casi el doble por mes. Es un cambio significativo además de todos los aumentos para afrontar los gastos cotidianos que se están registrando por la inflación”.
Los alquileres están casi atados a la inflación, el método de ajuste se apoya en el Índice de Contratos de Locación (ICL) que regula el Banco Central y las previsiones respecto de los datos en los que éste se basa son inflación y remuneración promedio.
“Es un escenario atípico en donde si el Gobierno nacional no logra contener la inflación este desacople seguirá impactando en los precios de alquileres. Puede llegar un momento del año en donde a los inquilinos se les complicará pagar porque sus sueldos no suben igual que la inflación. Y muchos podrían pasar a no abonarlos en tiempo y forma por no poder afrontar los gastos mensuales”, añadió Beigel.
Desde el sector argumentan que hay que ubicarse en dos lugares distinto: del lado del propietario y del inquilino. Daniel Bryn, analista de Real Estate y autor del Monitor Inmobiliario, dijo que “el propietario hoy ve que mientras la inflación escaló al 104,3% anual, siguió cobrando todos los meses sin ningún cambio, ni un peso más, los mismos $56.825 por el alquiler de un departamento de 2 ambientes en Palermo que alquiló a una persona en abril de 2022″.
Ahora con el ajuste anual, desde el 4/2023 comenzó a cobrar $109.441, un aumento de casi el 93%, mientras hoy un departamento similar se alquila en el mismo barrio por $130.000 al mes.
El inquilino mientras pudo planificar sus pagos mensuales y abonó un monto fijo de $56.825 durante 12 meses, hoy le aumentan de un día para el otro $109.441, en un país en donde el sueldo promedio no superó el aumento del 95% (RITPE/Nación) y el resto de los bienes por la inflación aumentó un 104,3% anual.
“En pocas palabras, lo que menos aumentó fue el alquiler, por ello es que el propietario hoy frente al cambio de una nueva ley que se proclamó pero parece que no se producirá, espera a los cambios en lugar de poner nuevamente en alquiler alguna propiedad que tiene. Y el ajuste del alquiler es menor a la inflación, dado que el ICL se ajusta por sueldos e inflación. La falta de certidumbre sobre si va a haber o no un cambio en la Ley de Alquileres lejos de tranquilizar suma más dudas en un mercado con muy poca oferta de locaciones”, concluyó Bryn.
Fuente: Infobae