Un nuevo incendio en el basural en la localidad vallista de Animaná, deja en manifiesto el tremendo daño ambiental que la falta de inversión y políticas públicas está causando en una de las zonas más productivas de la provincia de Salta.
La zona de Animaná, enfrenta incendios incesantes en el predio en donde confluyen los pasivos de Cafayate, Animaná y San Carlos. El basural, en manos del Consorcio del Valle Calchaquí, es un foco de contaminación constante, ya que gran parte de sus desechos termina sobre el rio Calchaquí y napas freáticas de la toda la región.
Debido es esto, los concejales cafayateños declararon emergencia ambiental, lo confirmó el presidente del Concejo Deliberante de Cafayate, Rodrigo Chocobar, quien mostró su preocupación frente al colapso del vertedero: «la comunidad en general y el Concejo Deliberante, somos conscientes de que hoy se trata de un gran basural a cielo abierto, con incendios que se mantienen en mayor o menor medida desde hace un año, por lo que los concejales cafayateños resolvimos declarar la emergencia ambiental y de salud, para que se tome noción de la problemática que ocurre en ese lugar».
Chocobar describió la situación como «crítica» y advirtió: «no creo que vaya a mejorar en estos meses de gestión que quedan del intendente Almeda (atento que Cafayate es el municipio que más pasivos produce), y es que si en 12 años no pudo mejorar, en 5 meses no esperemos tener esos resultados».
El edil remarcó la necesidad de que, tantos los intendentes reelectos, como los que asumirán por primera vez en diciembre, incorporen en sus planes de gobierno, las estrategias para dar respuestas a este planteo de larga data: «es necesario dar soluciones al tratamiento de los residuos, y sobre todo ver y rever la situación del consorcio».
Chocobar también se refirió a la preocupante situación en relación a los números que no cierran para el manejo de este ente: «se sabe que el presente es inviable, porque los aportes que están realizando actualmente los municipios, no son los que deberían ser, y las autoridades municipales lo traducen en la falta de recursos económicos». «Soy crítico de esta situación, porque desde la creación del consorcio no hubo una visión de alcanzar la autosustentabilidad».
También aprovechó la oportunidad para desmentir la llegada de fondos para el consorcio, el jefe comunal de Animaná (Rolando Guaymás) afirmó que: «no hemos visto nada, son sólo anuncios, y no tenemos ningún tipo de conocimientos sobre ese tipo de fondos», enfatizó.
Chocobar informó que en el marco de la última reunión que mantuvo con autoridades de ambiente de la provincia en Cafayate, se comprometieron en el giro de un subsidio de 10 millones de pesos como paliativo frente a la situación «desconocemos si llegaron esos fondos, y desde el Consorcio negaron el manejo de sumas de dinero», manifestó el presidente del Concejo cafayateño.
Además de la preocupación por posibles pérdidas materiales, hay alerta por los gases tóxicos que pueden generarse por la combustión de la basura y la contaminación que se puede generar, y que se repite año a año.
En abril de 2.022 el Intendente Almeda, acompañado de sus pares de Animaná y San Carlos, dieron a conocer la situación compleja del Consorcio de residuos del Valle Calchaqui
En ese momento, Almeda aseguró que a causa de los incendios intencionales de ese año,» llevó a gastar $ 600 mil en horas camión y maquinas». También informó que sólo durante 2.022 se destinó 11 millones de pesos para mejorar el lugar, buscan mejorar la seguridad del lugar con la instalación de cámaras de seguridad y la construcción de un perímetro, algo que nunca sucedió, o al menos hasta el momento.
Tras estas denuncias resolvieron que cada municipio miembro implemente una “eco tasa” que permita generar más recursos para poder trabajar mejor en el manejo de los residuos, mejorar el parque automotor y aumentar el volumen de material reciclable a cargo de la Cooperativa de Reciclaje, situación que tampoco ocurrió.