La comunidad Wichí de San Felipe, en Rivadavia Banda Sur, nuevamente quedó aislada tras un nuevo desborde del río Pilcomayo que ha dejado al pueblo completamente rodeado de agua. Dalmiro Acosta, reveló los desafíos y dificultades que enfrentan los habitantes de San Felipe.
El desborde del Río Pilcomayo ha generado inundaciones que han dejado a la comunidad aislada, con el camino vecinal hacia Rivadavia completamente cortado. El acceso se ha convertido en una travesía peligrosa, con un trayecto de dos kilómetros de agua y barro, lo que dificulta enormemente la movilidad de los habitantes y el suministro de bienes básicos.
La falta de respuesta por parte de las autoridades locales, según indicó Acosta, ha dejado a la comunidad en una situación desesperada. Así lamentó que ni el Intendente Cuenca ni ningún representante municipal se hayan acercado a la zona para evaluar la situación o brindar ayuda. Esta ausencia de apoyo se traduce en graves consecuencias para la comunidad, incluyendo la imposibilidad de recibir atención médica adecuada, ya que las ambulancias no pueden llegar a la zona.
En tanto, y consultados por este medio, desde el Ministerio de Desarrollo Social aseveraron que días atrás se llevó asistencia a la comunidad, y que se encuentra pautado el acompañamiento durante los próximos días.