Astrónomos descubrieron que el asteroide 3200 Phaeton está aumentando su velocidad de giro, aproximadamente 4 milisegundos por año, un fenómeno que preocupa a la comunidad científica y ante la falta de información, analizan si pudiera tener efectos sobre la Tierra a futuro.
Se trata de uno de los asteroides más particulares del Sistema Solar porque tiene una órbita muy inusual que lo lleva más cerca del Sol que cualquier otro planetoide rocoso. Además, es de los pocos con un color azulado y su velocidad está aumentando sin parar.
3200 Phaeton fue catalogado como «NEO» por las siglas en inglés, Near Earth Object, que significan Objeto Cercano a la Tierra. Es un asteroide de 5,8 kilómetros de ancho que, si bien pasa usualmente cerca de la Tierra, no representa un peligro para nuestro planeta. El 7 de octubre de 2026, el 23 de diciembre de 2027, el 23 de noviembre de 2030 y el 16 de octubre de 2036 se producirán los próximos acercamientos a la órbita terrestre.
Aunque este planeta menor tiene muchos atractivos, el principal y más sorprendente para los expertos es su tonalidad azul. En 1983 se descubrió el misterioso color de este asteroide. Sin embargo, luego de muchas teorías, los científicos de la Universidad Johns Hopkins revelaron en 2022 la explicación de dicho fenómeno: se acerca tanto al Sol que su temperatura en superficie alcanza los 800 grados Celsius, suficiente como para vaporizar las moléculas ferrosas que dan su tono rojizo a otros asteroides y dejar solo roca y minerales que reflejan la luz en tonos azulados.
Gracias a la forma en la que cambia su luz a medida que gira sobre sí mismo los astrónomos pudieron medir el período de rotación del asteroide y de esta forma comprobaron que está aumentando su velocidad de giro. Por año acelera 4 milisegundos. Si bien parece relativamente poco, hay que tener en cuenta que los asteroides normales no modifican su periodo de rotación. Es por eso que este fenómeno se ha convertido en un misterio espacial.