Los diputados franceses aprobaron este martes una ley para prohibir las “terapias de reorientación sexual”, que buscaban imponer la heterosexualidad normativa a personas del colectivo #LGBTIQ+.
La propuesta de ley prevé la inclusión de un nuevo delito en el Código Penal que castiga estas prácticas hasta con tres años de prisión y 30.000 euros de multa.
“Las terapias de reorientación, prácticas bárbaras de otra época, ya están prohibidas definitivamente en nuestro país. Nada que curar”, tuiteó la ministra de Igualdad, Élisabeth Moreno.
En tanto, el presidente Emmanuel Macron escribió en sus redes sociales: “Estemos orgullosos, estas prácticas indignas no tienen cabida en la República. Porque ser uno mismo no es un delito, porque no hay nada que curar”.
