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“Mi desafío es ver lo que los entrenadores no ven”

Diego Rodríguez divide su tiempo entre dos pasiones, el rugby y su finca en la localidad salteña de Talapampa. Empresario y desarrollador urbano, juega al rugby desde los 12 años. Fue el primer, y hasta el momento, el único salteño en ganar una medalla olímpica dorada en 2018 como entrenador del equipo nacional de Seven. Este año volvió a repetir la hazaña en los Juegos Sudamericanos realizado en mayo pasado en la ciudad de Rosario, Santa Fe. Como el Rey Midas, todo lo que toca se convierte en oro.
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Rodríguez, junto a Lucas Borges condujo el proyecto que le valió a Argentina la medalla de oro en los YOG Buenos Aires 2018. Hoy lo lidera. “Los juegos de Rosario se hicieron porque se dio de baja el Dakar 2022, que eran las olimpiadas juveniles, los “Youth Olympic Games”, por la pandemia y que ahora se hacen recién en el 2026, es como un preolímpico”, explicó.

“Mi desafío es ver lo que los entrenadores no ven” - Revista Salvador

Cuando le preguntan cuál es el objetivo de los clubes en Argentina, no duda, lo tiene muy en claro. “El fin primero de los clubes y de los seleccionados, es generar hombres y mujeres de bien para la sociedad, más que tener buenos atletas, porque las personas que nosotros formamos en los clubes, antes que, en los seleccionados, después van a ser médicos, políticos, ingenieros, amas de casa, van a tener que educar hijos, van a ser maestros de escuelas o van a dar clases en las universidades. Van a gobernar el país. Entonces no nos podemos equivocar en la persona. Ese es el aporte que yo creo que el rugby y el deporte le hace a la sociedad y que es formar hombres de bien para su pronta incorporación”

¿Fueron todas disciplinas deportivas olímpicas las que participaron en Rosario?

Si, deportes individuales y grupales. En esta oportunidad, a Argentina, creo que en el medallero quedamos terceros con una predominancia importante en los deportes de equipo; le fue bien en hockey, en futbol, en rugby, en vóley, en básquet. En los deportes individuales, me parece que es como el costado más flaco.

Vamos al rugby. Al margen de que hayan ganado la medalla de oro, el nivel de juego que mostraron fue increíble. Pareciera como si se hubieran acelerado y ahora juegan más rápido. ¿Qué es lo que pasó en el medio?

A mi justamente me preguntaban antes del torneo, cuando estábamos entrenando en Olivos, acerca de los rivales, y yo no tenía demasiado para decir, porque francamente no los conocía y ellos no nos conocían a nosotros. Pero mi foco y el foco del equipo estuvo puesta en Argentina, siempre. El gran objetivo del torneo era encontrar el pico de juego, encontrar nuestra mejor versión en el torneo y eso era un camino en una línea ascendente y para lo cual teníamos que ir superando objetivos cumplibles y progresivos, que se fueron dando y que dependían únicamente de nosotros. Nunca un objetivo nuestro dependió del nombre del rival. Nuestro objetivo tenía que ver con ser mejores nosotros y eso fue lo que se vio a lo largo del torneo.

Me comentabas que los empezaste a conocer cuando tenían 14, 15 y 16 años. ¿Cómo haces para preparar a un chico de 14 años para que llegue a ese nivel?

Te cuento algo, la preparación fue corta, lo cual desmitifica que el proceso para ser exitoso tiene que ser larguísimo. Lógicamente estos chicos están en la edad de aprender, entonces avanzan rápido. Tiene que estar bien estimulados también. Debo decir esto. Fueron una máquina de aprender y el perfil lo tienen.

¿Cuánto tiempo estuviste entrenando con ellos?

Yo los vi por primera vez en noviembre del 2019. Tuvimos una concentración en La Plata y nos volvimos a juntar en febrero del 2020 en el CeNARD, y entramos en pandemia y no nos vimos nunca más. Yo tenía que terminar el scouting porque estos chicos fueron parte de estas dos concentraciones, pero a mí me quedaba un pedazo de Argentina por ver y cuando pude reanudar los viajes, hice seis más por las academias de Argentina y salió el resto. Después nos juntamos, entrenamos en una concentración en Catamarca que duró una semana, estuvo muy buena y después nos volvimos a juntar en Olivos previo a Rosario.

¿Cuánto tiempo fue?

Desde que salimos de casa hasta que llegamos fueron 10 días, pero neto, fueron 8 días juntos.

Durante esos días ¿qué haces? Porque evidentemente son chicos que ya estuvieron entrenando, vienen jugando y que tuvieron buenos directores técnicos. ¿Cuál es tu función?

Primeramente, yo dividí esa etapa previa a Rosario en dos partes. El tiempo en Buenos Aires fue para armar el grupo, si bien paralelamente veníamos entrenando, y una vez en Rosario íbamos a buscar ir creciendo en lo deportivo netamente. Obtuvimos un buen resultado a lo largo del tiempo, fue un aprendizaje progresivo, manifiesto y comprobable. Muy estimulado en base a tener una estadía feliz; hablamos de alegría todo el tiempo, los pibes humanamente espectaculares. Todo eso ayuda. Y no hablar que tienen un don para jugar al rugby, ni nada de eso. Todo eso ayuda.

¿El plantel de jugadores lo elegís y definís vos?

Si. La lista principal la doy yo y la prueba la mesa de la UAR. Necesita esa revisión para ser aprobada y una vez que se aprueba se publica.

¿Cuántos chicos viste?

500 más o menos. Esta división, de los chicos nacidos en el año 2004 y 2005 en Argentina, entre varones y mujeres son 12 mil. Yo supongo que deben ser no más de 2 mil las mujeres, estamos hablando de 10 mil varones que juegan al rugby. Yo vi 500 que fueron elegidos por sus directores de centro o managers de academias y de ahí salieron estos 12.

Y de esos 12 ¿cuál te gusta más? O no podes decirlo…

Lógicamente me gustan los 12 porque los elegí, viste que el rugby tiene, en realidad como todos los deportes de equipo, en donde cada integrante tiene un rol y no son comparables ¿no? El arquero tiene que ser buen arquero y el 9 tiene que hacer goles. Creo que logré armar un grupo lleno de posibilidades, es un equipo muy versátil en donde todos los jugadores podían jugar casi en cualquier puesto.

Tuve la oportunidad de conocerlo a Benjamín Elizalde que es salteño y que además es capitán de este equipo. Un hecho inédito que capital y entrenador sean de Salta, que yo me acuerde nunca sucedió eso…

Voy a justificar un poco mi decisión y tiene que ver principalmente con la calidad humana de Benja que es un chico que además nos va a dejar bien parados a los salteños y argentinos a donde vaya porque es una persona increíble, antes que nada. Tiene un don para liderar positivamente un grupo, que es un ejemplo en su vida privada: es un chico que estudia, se entrena, se de lo humilde que es. Se de la familia a la que pertenece y todo eso hace que sea un buen ejemplo para el equipo. Yo cuando busco el capitán, busco que sea una persona que nos pueda representar en cualquier lado y que nos haga quedar bien y que sea un ejemplo integral. De hecho, va a estar mucho más tiempo fuera de la cancha que dentro, no tan solo tiene que ser un buen capitán cuando juega, sino que también afuera porque vos estas el 99% del tiempo estas afuera de la cancha.

¡Qué familia! porque Tomi, el hermano está en el circuito del Seven y la mamá también tengo entendido que fue Leona…

Si. La madre creo que jugó en Las Leoncitas y si, viene de una familia deportista. Tiene a su hermano también que juega en el Newman y juega muy bien y Tomi que hora está también en Buenos Aires y es parte del equipo de Pumas Seven y está jugando en el circuito mundial y ahora aparece Benja.

Cuando estás buscando chicos, cuando vas a buscarlos y después de la selección que hacen los entrenadores de cada uno. ¿Qué es lo que miras? ¿Qué es lo que buscas en definitiva?

Yo lo separaría en dos partes: el chico que juega muy bien al rugby, que lo vemos todos. Mi desafío es ver lo que los entrenadores no ven, o buscar algo que se le está pasando y que ahí aparece te diría el prototipo de jugador. Si vos me decís, si bien, no hay una sola verdad sobre esto, pero los jugadores altos, rápidos y valientes, te diría que tienen casi todo para jugar Seven.

Estoy viendo que son todos chicos muy altos que parecen segunda línea…

Sí, porque vos tenes en el Seven, lo que es en el 15, el scrum y el lineout, la obtención acá la tenes por jugadores, entonces a partir de la salida a mitad de cancha, las recepciones. Y tenes una ventaja si tenes jugadores altos. Te dije rápido, altos y valientes: tenes que tener buen juego aéreo, pasar bien la pelota, defender, etc.  

Y tenes que tener un acto físico increíble porque es un juego más anaeróbico…

Totalmente. La preparación física es la piedra fundamental del Seven, para poder competir, para poder tener muchas acciones en el partido o durante el torneo. Tenes que estar preparado físicamente lo mejor posible para que te pares rápido, taclees, estés disponible de vuelta, para que seas veloz para poder correr con la pelota, para apoyar, para llegar a una salida de mitad de cancha y poder saltar alto, etc.

Salta tiene y siempre tuvo buenos seleccionados y buenos jugadores. Vos llegaste a ser campeón de la República, de Entre Ríos, fuiste entrenador de un Seven y lo mismo. Lo tuvimos a Lucio López Fleming como uno de los mejores jugadores a nivel mundial. ¿Salta siempre tuvo buenos jugadores del Seven?

Si Salta tiene, tuvo y va a seguir teniendo y va a depender mucho de los entrenadores de como los preparemos para que lleguen. Yo, después de dar vuelta por la Argentina de norte a sur y de este a oeste, te digo que el jugador argentino es el mismo en todos lados. Evidentemente está mejor estimulado en una región que en otra, pero es el mismo. El punto a desarrollar me parece que son los entrenadores, que somos los educadores y los que tenemos que llevar. La preparación está en manos nuestras. Tenemos que desarrollarnos para poder prepararlos bien.

El rugby y el Seven son dos deportes distintos, por la preparación física, por el tiempo, por la formación, por la dimensión. Es decir, todo lo que uno puede imaginar es distinto. ¿Cómo fue tu paso del rugby de 15, al seven?

Mira, yo cuando jugaba 15, jugaba seven también, así que no fue una transición muy traumática, fue súper corta te diría. Después, cuando me hice entrenador, tuve que empezar a comprender y a pensar como entrenador que es muy diferente. Vos cuando entrenas, sos el director de la orquesta y tiene que salir todo bien. Tu responsabilidad es enorme, porque todo lo que pase es responsabilidad tuya, la toma de decisiones. En el scauting sos el que elegís, sos el que da la lista, el que elige el capitán, el que arma el equipo, el que hace los cambios para que las cosas sigan funcionando. Entonces tenes que prepararte para un montón de cosas. Cuando sos jugador, tenes que prepararte nada más que para jugar.

Aclaremos algo. Son 7 tipos los que tienen que hacer el papel de 15 y en una cancha para 15: sistema de defensa, de ataque, de rotación, todo es distinto…

Por eso los tiempos duran 7 minutos.

Y las semifinales duran 10…

No. Ya no duran 10, ahora duran 7. Se hizo un estudio y se analizó y se sacó la conclusión a partir de este estudio, de que la mayor cantidad de lesiones en el seven en el circuito mundial, aparecían en los equipos que jugaban la final que eran de 10 y 10, lo cual hablaba del nivel de exigencia y el agotamiento que conlleva. No te olvides que llegan a la final, los equipos que más partidos juegan y aparte de jugar la final, haber tenido que jugar la semi, tenían que jugar un partido contra el mejor rival del torneo de 10 minutos y 10 minutos, entonces se sacó la conclusión de que la gran mayoría de las lesiones de los jugadores pasaban por ahí y se las acortó.

¿Cuándo empezaste a jugar al rugby y en dónde?

Empecé a los 12 años. Me llevo un amigo de mi padre a un entrenamiento a Gauchos, un club ya extinto. Me gustó y cuando volví a mi casa estaba tan contento que, mi padre me dejó seguir, pero con la condición que juegue en Gimnasia y Tiro.

¿Cuántos años jugaste?

Y jugué hasta los 36, que me fui invitado a una gira a Sudáfrica con el Jockey de acá de Salta y fue mi última gira como jugador.

¿A qué edad debutaste en primera?

Y tenía alrededor de 19 años.

¿Y en el seleccionado de Salta?

También en ese mismo año y al año siguiente.

Después fuiste parte del equipo que ganó el Seven de la Republica. Me acuerdo que fue una tremenda sorpresa que hayan ganado…

Si. Y al año siguiente tampoco fuimos ganadores, Salta clasificó con la copa de plata al año siguiente. Yo siempre que digo los triunfos o los procesos exitosos tiene que poder sostenerse a lo largo del tiempo porque eso habla de que tiene una base sustentable, tiene cimientos. Si no, tiene mucho que ver con la casualidad. Camadas que se juntan, o entrenadores buenos. Pasó con Gimnasia en el año 99 que ganamos el regional y fue un año extraordinario que se juntó una camada muy buena, con un entrenador muy bueno; se juntó con un Tucumán cagado a palos, con un Universitario cuesta abajo. Y al otro año no lo pudimos repetir y nunca más estuvimos cerca.

Ganaron al año siguiente creo que sacaron plata…

Si, de hecho, fuimos a jugar y al año siguiente ganamos la final de plata o la semi de plata. Diferente fue en el 2011 que salimos campeones, y en el 2012 jugamos por 3ero y 4to y en el 2013 volvimos a jugar la final y la perdimos con Buenos Aires. O sea, fueron 3 años seguidos de podio. Ahí ya me tocó estar como entrenador, pero eso es otro proceso.

“Mi desafío es ver lo que los entrenadores no ven” - Revista Salvador

Le preguntaba a Benjamín que es más difícil o que le da más nervios, si comenzar el primer partido o la final. Y ¿para vos?

Normalmente tratamos de plantear objetivos que tengan que ver con nosotros, nada de lo que hagamos nosotros depende del equipo del frente. En este caso, fue un objetivo progresivo de crecimiento que después se terminó viendo un equipo con muchísima inercia que nunca se frenó, siempre se aceleró. Te diría que el primer partido no sabes con que te vas a encontrar. En el primer partido vos ves a tus rivales, o sea que en el segundo partido ya jugas contra alguien que ya viste y ese fue el caso de Rosario. El primer partido lo abrimos con Colombia y después jugamos con Chile habiéndolo visto jugar a Chile, ya sabíamos que nos íbamos a encontrar. En el primer partido no. Te diría que, en ese aspecto, el primero es el más complicado.

Siempre se menciona que los deportes pasan como la salud de la gente. Hay días que tenes buena salud, mala salud o estás en picada. El rugby argentino ¿en qué estado lo ves?

Mira, el rugby argentino es único en el mundo. Hay datos de color que son extraordinarios. Argentina tiene 549 clubes que ninguno es parecido a otro, tiene muchos cubes en el interior y en esos, se nuclean a 120 mil jugadores de todas las categorías. Y esos 120 mil jugadores son educados por 30 mil voluntarios. Eso es un dato único en el mundo. 30 mil voluntarios que son exjugadores, padres, amigos del club. Que son personas que van a los clubes a cambio de nada a educar a los chicos. Te estoy hablando de un grupo de 30 mil educadores muy heterogéneo, pero que manejan los mismos valores. De rugby podemos hablar lo que quieras y de mil maneras, pero tratamos de tener un punto en común y lo encontramos en que la persona es lo más importante.

La estructura de clubes que tiene la Argentina, bien lo mencionabas, es única en el planeta, pero en esta época de profesionalización eso atenta contra los clubes, se puede complementar con los clubes, o los termina matando…

No, porque yo considero que esta profesionalización es necesaria para que Los Pumas puedan jugar los torneos de elite. Ahora, fíjate vos como los clubes están creciendo en números a partir de Jaguares y a partir de Los Pumas en la champion, porque los chicos quieren imitar a Los Pumas y eso hace que vayan más chicos a los clubes. No se lo ve como una sangría del club. El club está produciendo jugadores para los seleccionados nacionales y si lo seleccionados nacionales andan bien, tienen competencia y son un buen ejemplo para los chicos, es un chorro que no para de emanar para los clubes. Fíjate que hoy los clubes tienen más jugadores que hace un par de años.

Llama la atención la cantidad de jugadores que tiene la Argentina, porque uno conoce los más famosos, pero la cantidad de chicos que están jugando en resto de América y en Europa es impresionante…

Si, es verdad. Y eso tiene mucho que ver con lo que se vivió en Argentina. La migración de jugadores a la liga americana o a las segundas ligas europeas como la italiana y la española, tiene que ver con el momento que se vive en nuestro país. Tiene mucho que ver con lo económico o con una oportunidad de vida, de vivir mejor y de poder hacerse una vida en países que funcionan bien.

El proceso de selección ¿dónde comienza?

Hay una sola cosa con la que nosotros los selectores no nos podemos equivocar y es la persona. Después, la discusión del jugador digamos, podemos opinar diferente. Pero en donde no nos podemos equivocar es en la persona. Más en la categoría que yo entreno, porque ese chico va a ir a los seleccionados nacionales, es el caso de Benjamín Elizalde. Ese chico va a ser un ejemplo en su club y probablemente algún día sea el capitán de la primera y va a ser la luz del faro de su club. Algún día va a ser entrenador y presidente de su club. Entonces no podemos sembrar en la persona equivocada. Para tener un buen presidente dentro de 20 o 30 años, tengo que elegir una buena persona hoy.

¿Y quién selecciona a los entrenadores? ¿Cómo se seleccionan?

Que buena pregunta. Esa es tarea de los dirigentes. Por eso no te podés equivocar en la persona. Porque para la capitanía o para el entrenador, cuando sea dirigente, va a elegir entrenadores que esos entrenadores van a elegir seleccionados y capitanes. O sea, es una rueda virtuosa. Es complicado, pero es el camino.

¿Cuánto tenes que entrenar el físico y cuanto tenes que entrenar la cabeza y como tenes que entrenar la cabeza?

Mira, ser persona o tener una cabeza sana te va a acompañar para toda la vida, tener buen físico para jugar al rugby te va a acompañar el minuto que vos juegues nada más. Entonces yo armaría un plan donde diga cuanto voy a usar la cabeza y cuanto voy a usar el físico; “el físico lo voy a usar los sábados, martes y jueves para entrenar, y la cabeza la voy a usar todos los días toda mi vida”. Entonces tengo que tener una cabeza sana. Eso te lo digo desde la parte psicológica. Después la cabeza del atleta, para jugar, tiene que ser de un tipo que no se caiga, porque a lo largo de un partido, a lo largo de un torneo, inclusive en el Seven más que nada, el factor anímico sube y baja, porque vos de estar ganando, pasas a estar perdiendo, a que se te cumpla el tiempo y no poder darlo vuelta, a que tenes un rival superior el partido que viene… y vos tenes que tener muy sólida la cabeza, no resignar nada y reponerte rápido. Y dar todo. Y para dar todo, todo el tiempo, tenes que tener mucha cabeza. Tenes que estar muy comprometido con el grupo, con el equipo, con tus compañeros, con el entrenador, con lo que representa y para eso tenes que estar feliz.

Estoy de acuerdo, pero los temperamentos tienen que ver con cada uno ¿no? Somos todos distintos…

Sí, claro. De hecho, a los seleccionados no van todos. Yo te digo, hay 10 mil, vi 500 y a los juegos fueron 12.

Que difícil debe ser seleccionar de tantos, tan pocos…

Por suerte se viene haciendo un trabajo espectacular desde la Unión Argentina de Rugby en lo que es la búsqueda de temprana edad, y en lo que a mí respecta, estoy involucrado desde noviembre del 2016 y yo me doy cuenta que por primera vez salí a trabajar con jugadores juveniles y la cantidad que hay en Argentina, es sumamente alentadora. Tenemos que mejorar el scouting y tenemos que mejorar la formación de alguna manera. La Unión Argentina mediante diferentes capacitaciones nos está haciendo mejores entrenadores, mejores entrenadores de clubes, mejores preparadores físicos de clubes. Mejores árbitros, mejores dirigentes, nos está educando a todos de alguna manera. Porque la educación es el camino.

¿Jodió mucho la pandemia?

Fue muy difícil porque imagínate que estuve algo así como un año y medio sin poder salir, los jugadores sin poder entrenar. Jodió en el sentido en que se tuvo que replanificar todo lo planificado. Que iban a ser 4 años y terminaron siendo uno y medio sobre la competencia, entonces eso hizo que relegáramos un montón de cosas. Pero bueno, la planificación siempre tiene que poder ser modificable.

En el caso de la pandemia fue muy duro porque nadie sabía que iba a ser tan largo y tanto tiempo, pero bueno, lo pudimos sacar a flote.

¿En el próximo mundial como ves a Argentina?

A Los Pumas los veo con entrenador nuevo, veremos qué pasa, pero muy bien. Los equipos argentinos, los jugadores que tiene Argentina están preparados, juegan en las mejores ligas del mundo, juegan rugby championship. Creo que Argentina ha venido creciendo y tiene que seguir creciendo.

Pero como equipo por ahí no funcionamos bien… Habrá que ver que plantea el entrenador porque muchas veces uno no logra comprender, porque tampoco está en la cabeza del entrenador y tampoco sabe que está buscando uno. Uno a veces va a tras de los resultados o juzga, pero en realidad son procesos. Uno está queriendo resultados, y el entrador lo que está haciendo es llevando su equipo a que crezca y que explote, por ejemplo, en el mundial o en otro tipo de competencia. Es muy difícil hablar desde afuera. Si, lo que no tiene que hacer uno es fanatizarse y tratar de ser duro con los juicios, porque uno a veces habla como hincha y la cabeza de quien está al mando funciona como cabeza de entrenador. Una vez que sos entrenador, nunca más ves nada de la misma manera. Yo voy a Gimnasia y Tiro y nunca más lo vi como hincha, voy a un partido de rugby y me sale analizarlo de otra manera, así gane o pierda.

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Director

Eduardo Huaity González

Salvador® es una publicación de
Editorial ABC S.R.L.
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Salta, Argentina